martes, 1 de octubre de 2013

Tenida nº 100

La masonería es una vocación personal, un destino individual en pos del perfeccionamiento moral y la labor benéfica para la mejora social. Una difícil tarea para aquellos que la emprenden, aunque llevadera por ser compartida. La logia, pues, se convierte en el lugar donde un grupo de personas comparten este propósito y la vocación común se convierte, con el tiempo, en una sólida unión que promueve la fraternidad. Sin embargo, estos objetivos se tuercen en más de una ocasión por las ambiciones personales y la intolerancia. Forma esto parte inevitable de la condición humana, de las debilidades consustanciales a unos individuos que son como todos los demás en una sociedad donde la moral y la armonía en la convivencia son un factor cuando menos secundario frente al egoísmo y la vanidad. No obstante, la Respetable Logia Simbólica Luz Interior nº 123, consagrada en 2002, celebra este mes que iniciamos hoy su tenida nº 100. Cien encuentros masónicos donde los Hermanos, lógicamente, no han sido siempre los mismos, aunque no pocos de ellos permanecen bajo el cobijo de nuestras columnas. Algunos no están en el presente por diferencias, otros por avatares de la vida familiar o profesional, otros porque fueron llamados al Oriente Eterno. Desde este blog les mandamos a todos nuestros abrazos más fraternales porque, sean cuales fueran las razones por las que están ausentes, los llevamos en nuestro corazón y nuestro recuerdo. También destacamos la labor de las Hermanos que han permanecido fieles a su compromiso de mantener viva nuestra logia, a los que se mantuvieron fuertes en los momentos duros y, con su sabiduría y trabajo, han hecho que nuestras columnas se mantengan erguidas y cada vez más fuertes. Todos nosotros les damos las gracias por tantos sacrificios a favor de nuestra Logia. El próximo día 11 nos reuniremos, como siempre decimos, en el punto geométrico solo conocido por los Hijos de la Viuda. Será un día de gozo que también compartiremos con Hermanos de otras logias de Canarias, amén de amigos y allegados. Estamos, en fin, de enhorabuena tras más de un decenio de trabajo, contribuyendo a levantar, modestamente, el templo A la Gloria del Gran Arquitecto del Universo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario